El 6 de diciembre es un día muy especial en Alemania, pues se venera a San Nicolás de Bari (Nikolaus von Myra). Es costumbre -también en otros países centroeuropeos como Luxemburgo, Bélgica, Países Bajos, República Checa, Rumanía, Hungría o Eslovenia– que los niños saquen sus zapatos o botas a la puerta de sus casas para que San Nicolás (Nikolaus) les traiga algunos regalitos como mandarinas, frutos secos, chocolatinas, dulces…
¡Eso sí, sólo a aquellos niños que se han portado bien durante el año y, además, han limpiado a conciencia su calzado la tarde del día 5! Si no, Nikolaus como mucho deja algo de carbón.
Un año más hemos querido acercar esta bonita tradición a nuestros alumnos, hablándoles de la historia que hay detrás y haciéndoles participar de un día tan esperado por los niños en muchos países.